KOMO UNA NiÑA KON ZAPATOS NUEVOS

Y me sentí komo una niña kon zapatos nuevos....

Rasgo el papel para ver lo que se eskonde detrás.
Abro la kaja, y allí estaban.
No pude decir nada.
Era komo si yo misma les hubiera komprado y kolokado en akella kaja para mi. Y kería, kería ponermelos...

Pero no fue tener unos preciosos zapatos nuevos en los pies, lo que te hace sonreir. Sino, poder darte kuenta, que todavía hay gente q merece la pena konocer, que sin esperartelo, te sorprenden de esa manera, que ven más lejos de una mera producción nocturna.

Gracias pequeño.

Y... puede que sí. Puede que escriba kada uno de esos momentos por varias razones, si es un buen momento, kiero que ese pellizkito de azukar endulce la vida de kien lo lee. Y si por el kontrario, el gris baña esos instantes, entonces, las personas que alguna vez sintieron komo yo sabrán que todos pasamos por situaciones parecidas alguna vez. y puede que se kree una linea imaginaria entre las partes de alguna manera.

Gracias de nuevo

Kuando kiera eskapar, kiera volar... me pondre mis zapatitos nuevos, y chokaré tres veces los talones y pediré poder hacerlo.